domingo, 19 de septiembre de 2010

Haz Feliz a una Gallina

Foto: Luis Miguel Bugallo Sánchez
César Javier Palacios, periodista, geógrafo, naturalista y miembro de la Fundación Félix Rodríguez de la Fuente nos explica la importancia de las cifras de huevos de gallina.

Dice la Real Academia que un gallina es un ser cobarde, pusilámine y tímido. También triste. Al menos lo son los 300 millones de gallinas que malviven hacinadas en las explotaciones avícolas europeas, productoras compulsivas de proteínas, sin más horizonte que una estrecha jaula de apenas un metro cuadrado compartido en grupos de seis, en pisos de doce, con el pico mutilado para evitar daños en la pelas por el espacio, con las patas achicharradas por las descargas eléctricas de unos dispositivos pensados para evitar daños a los preciados huevos.


Antes era lo contrario. Cuando llegabas a un pueblo las gallinas eran las primeras que salían a recibirte, aunque al contrario que los perros, no te hacían más caso que a las hojarascas que afanosamente escarbaban por el suelo en busca de algún gusano. Las seguían inquietos sus pollitos, mientras el gallo miraba orgulloso el grupo desde algún promontorio cantándole al sol. Eran la felicidad personificada, el modelo por excelencia de “Slow life”, de la vida tranquila, despreocupada, apacible. ¡Y qué huevos de gallina! Nada podía compararse al sabor profundo, auténtico, de ese delicioso manjar siempre acompañado por un gran trozo de blanco pan candeal recién salido del horno de leña.

Es cierto, somos muchos y necesitamos alimentos abundantes y baratos. El pollo es el principal de todos ellos. Sin embargo no todo está perdido. A partir de 2012, una nueva directiva europea obligará a los avicultores a acabar con el cruel sistema de producción industrial, a volver a las jaulas amplias con un nido donde cada ave pueda poner sus huevos, como siempre tuvieron en nuestros pueblos.

Por un consumo responsable


Pero desde hae algun tiempo podemos ya seleccionar en el supermercado un producto más respetuoso con los derechos de los animales, algo más caro, es verdad, pero de infinitamente mayor calidad. El secreto está escrito en el código de la cáscara. Fíjate bien, el primer dígito nos indica la forma de crianza de los animales:

•El código 0 identifica a los huevos de producción ecológica, donde además de estar criadas en libertad, las gallinas son alimentadas con pienso natural sin insecticidas ni componentes transgénicos.

•El código 1 identifica a los huevos llamados camperos. Las gallinas están alimentadas con pienso tradicional y viven en naves con acceso al exterior.

•El código 2 identifica a los huevos de gallinas criadas en suelo. Gallinas alimentadas con pienso tradicional que viven en naves sobre el suelo, pero sin acceso al exterior. En realidad viene a ser un hacinamiento horizontal, aunque de algún modo pueden considerarse algo más libres de movimientos.

•El código 3 identifica a los huevos de gallinas criadas en jaula. Son las gallinas hacinadas, las más tristes de todas ellas.

La compra justa es adquirir huevos marcados con un código que empiece por 0 ó 1. Lógicamente es la elección más cara, pero recuerda que además de comprar calidad estás haciendo mucho por mejorar la vida de estos pobres animales y, de paso, por ayudar a un desarrollo sostenible.

Fuente: REVISTA GEO



4 comentarios:

  1. Cuando voy al super miro el número, pero el tres es el que manda, dificilmente se encuentran otros número, el cero por aquí ni existe.
    Besos y feliz domingo.

    ResponderEliminar
  2. Un buen artículo, te felicito. Cualquier concienciación en este sentido es buena y nosotros desde los blog, podemos hacer bastante para extender estas ideas.
    Gracias por haberlo hecho tan bien.
    Saludos.

    ResponderEliminar
  3. Te he conocido a través de Espainfo.Me gusta encontrar paisanos tan creativos. Un saludo!
    http://arquitecturainteriorxxi.blogspot.com/

    ResponderEliminar

LinkWithin

Related Posts with Thumbnails